Diez años después del estreno de Yossi & Jagger (2002), Eytan Fox recupera la trama de su primer éxito con la película Yossi (2012), centrada en el protagonista superviviente de la primera parte de la historia. Aunque Yossi no está entre las mejores películas del genial director israelí, sí es clara muestra de su madurez como cineasta.
Yossi es el cuarto largometraje de Eytan Fox con un protagonista gay
Yossi es una película muy contenida, en la que la acción queda en un segundo plano y lo importante son los sentimientos. Su protagonista se gana rápidamente nuestra empatía gracias a la buena interpretación de Ohad Knoller, quien vuelve a encarnar al personaje de Yossi aprovechando que han transcurrido diez años tanto dentro como fuera de la pantalla.
Ante la muerte de Jagger, Yossi ha perdido la ilusión por la vida: no deja de darle vueltas a todo lo que ocurrió e incluso se culpa de la muerte de su amado. Ni siquiera sabe si Jagger escuchó su último “te quiero” antes de desvanecerse para siempre. Y es que el siempre sonriente Jagger le pidió que lo dejaran todo, le ofreció la felicidad, y él la rechazó para cumplir con sus obligaciones. ¿De qué le sirve ahora su antigua lealtad al Ejército?, se pregunto Yossi, convertido ahora en médico quizá para salvar más vidas de las que en su día quitó. O quizá para tener una responsabilidad sobre la vida de los demás que le evite pensar demasiado en la suya.
Yossi es una persona atormentada por su pasado. Por las decisiones y por los hechos. Pero ahora debe aprender a aceptar que el pasado no puede cambiarse. En un intento de sentirse cerca de Jagger de nuevo, visita a los padres de éste para contarles la verdad sobre su relación, pero ellos no pueden darle el consuelo que anhela. Nadie puede; nadie relacionado con Jagger, por lo menos. Apenas hay diálogos que expresen esta situación: a veces un silencio vale más que mil palabras.
El guapo Oz Zehavi encarna a la nueva pareja de Yossi con frescura
Pero lo que Yossi olvida es que el futuro sí puede cambiarse. Cuando conoce a Tom, un soldado muy simpático y abiertamente homosexual, Yossi siente que su vida comienza por fin a girar de nuevo. Pero tiene miedo. No quiere traicionar a Jagger y, además, es consciente de que sus largos años de martirio le han debilitado tanto psíquica como físicamente. Yossi siente que no es alguien digno de ser amado, pero solo necesita que alguien le recuerde que todo el mundo tiene derecho a ser feliz y que los vivos tenemos la responsabilidad de disfrutar de la vida por aquéllos que ya no pueden hacerlo.
Crítica de Juan Roures
