Reinaldo Arenas, de la película Antes que anochezca, 2000
Nací y viví en Cuba, donde aprendí a amar la vida tanto como aprendí a odiarla. Me crié en un ambiente rural al que no volvería y pronto me convertí en firme partidario de la Revolución. Hasta que me di cuenta de que no era bienvenido.
Gay y escritor. Dos motivos suficientes para ganarme el odio de Fidel Castro y sus aliados. Como figura pública, me convertí en un blanco fácil. Nunca olvidaré el día en que denuncié a unos jóvenes que me habían robado y la policía terminó deteniéndome a mí por ser tachado por “maricón”.
Fui encarcelado. Fui torturado. Y terminé renegando de todo, hasta de mí mismo. Nunca me perdonaré por ello. Ser homol me hizo la existencia imposible, pero también me ayudó a ver la vida con otros ojos. Y a plasmar mi visión en el papel para que mis sentimientos e ideas no sean nunca borrados del mapa del modo en que intentaron borrarme a mí.
Preguntas para el debate de Antes que anochezca
-¿Sería la obra de Reinaldo Arenas tan recordada y profunda de no haber vivido él una vida tan dura?
-¿Hizo bien Reinaldo Arenas en hacer pública su orientación?
-¿Renegarías de tu orientación en una situación crítica como la del protagonista?